sábado, 21 de marzo de 2015

Torrijas de cuaresma

Se acerca la Semana Santa y con ella llegan los dulces de esta época del año... Mis Torrijas, sólo las hago una vez al año pero cuando me meto hago para un regimiento. 
Me gusta hacerlas grandes y pequeñas y terminarlas algunas con aguamiel y otras con azúcar y canela... No puedo evitar dedicárselas a mi padre que le volvían loco. 
También estas van para Elena Fashho, una de mis más fieles seguidoras que quería aprender a hacerlas. 
Bueno pues venga poneos los delantales que arrancamos!!



Ingredientes: 

Pan para hacer torrijas, yo suelo usar el de la foto. 
500 gr de miel.
1 l. de leche entera
200 grs de azúcar
1 rama de canela
Canela en polvo
1 l aceite de girasol
6 huevos 


Preparación:

La leche:
En un cazo calentamos la leche con 100 gr de azúcar y una rama de canela y la llevamos a hervir, la retiramos y la volvemos a hervir y así hasta que hierva 3 veces, esto no se porque es, pero mi suegro dice que debe ser así y yo le hago caso. Dejamos enfriar.

El aguamiel:
En una jarra ponemos la miel y añadimos agua caliente, la proporción que suelo hacer es 3 partes de miel por 1 de agua. Movemos y dejamos enfriar.

El rebozado de azúcar y canela.
En un plato mezclamos azúcar blanca con canela molida y reservamos.



Una vez que la leche este fría, mojamos las rebanadas de pan por ambos lados, deben quedar bien empapadas y las ponemos en una bandeja a que reposen al menos 5 minutos.



Una vez reposadas, tenemos que freirlas.. En un bol batimos 6 huevos, vamos pasando las torrijas por huevo y de ahí al aceite. 

A la hora de freirlas debemos tener a mano 2 sartenes y un colador ya que cada dos o tres tandas tendremos que ir colando el aceite para que no se nos manchen de negro cambiándolo de sartén y añadiendo la cantidad que sea necesaria.

Ponemos el aceite al 9 en la vitro y cuando este caliente echamos las torrijas, yo suelo hacerlas de 2 en 2 para que no se enfríe el aceite, entonces bajamos la vitro al 7 y lo mantenemos así. Damos vueltas a las rebanadas  con mucho cuidado hasta que estén doraditas por ambas caras. Y las sacamos a una bandeja con papel de cocina para que escurran el aceite. 
Así seguimos haciéndolas hasta que estén todas. 


Ahora tenemos que terminarlas... 

Con aguamiel:
En una fuente ponemos una tanda de torrijas y las cubrimos con el aguamiel que habíamos hecho antes, ponemos otra tanda de torrijas y volvemos a cubrir y así hasta que todas queden empapaditas.

Con azúcar y canela: 
Vamos rebozando cada torrija por la mezcla de azúcar y canela y las depositamos en una fuente.

Y... Aquí está el resultado unas deliciosas torrijas de Cuaresma. 







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